martes, 8 de mayo de 2007

PEQUEÑA FILMOTECA PORTÁTIL. Richard Kern y el Cine de la Transgresión

"Yo tomo lo que me interesa de las películas y lo pongo en un formato más corto para no aburrirme. Lo que le interesa al público americano es el sexo, la violencia y el lado sórdido de la vida". - Richard Kern




Richard Kern nace en Carolina del Norte en el año 1954. A finales de los setenta se muda a la ciudad de Nueva York y va a parar al Lower East Side de Manhattan. Aprovechando los últimos rescoldos del punk y el nacimiento de la No Wave, artistas de distintas disciplinas están poniendo entonces en marcha un movimiento de contestación al baboso consenso de la era Reagan, que acaba de iniciarse. Por allí andan David Wojnarowicz, Lidia Lunch, la de los Teenage Jesus and the Jerks, Tommy Turner, Beth B y su compañero, Lung Leg o Nick Zedd, algo así como el padre intelectual de lo que, desde mediados de la década de los ochenta, vendrá a ser conocido como Cinema of Transgression.

El cine de la transgresión es un cine pobre, construido literalmente a partir de desechos: en muchas ocasiones el material fílmico procede del cubo de la basura o es producto del robo. Es un cine de mierda. Se alimenta además de lo que la potente industria del espectáculo ha ido arrojando a los márgenes de los circuitos comerciales: sobre todo, del fantástico y el terror de serie Z y de las películas pornográficas. Los referentes estéticos, los elementos temáticos (Sex & Drugs & Rock’n’roll) son los mismos que los del punk y derivados y no es extraño que sus cultivadores transiten con comodidad entre las pequeñas salas de conciertos del Bajo Manhattan y los platós de rodaje improvisados en apartamentos cochambrosos. Sin embargo y a pesar de ser un cine de rechazo y ruptura, también se asienta en una tradición torcida y es mucho lo que toma de la mordiente contestaria del viejo cine underground de los sesenta: Anger, Smith, Warhol y todos esos. Pero no le basta: el Cine de la Transgresión quiere superarlo. “Rompe tantas reglas como puedas”, recomienda Zedd en su Manifiesto. “Un film que no impacte –añade- no merece ser visto”.

Los trabajos que Kern va a producir, dirigir, fotografiar y, a veces, protagonizar se ciñen perfectamente a este imperativo de la ausencia de imperativos, a esta libertad que quiere escapar a cualquier tipo de constricciones morales o estéticas y que no se impone acaso más regla que la siguiente: “haz lo que te salga de los cojones u ovarios, se breve y no des el coñazo”. La primera película de Kern, un paseo por las tiendas de pornografía de la calle 42, lleva por título Goodbye 42 Street y está rodada en el año 1983. A ésta le sigue un par de cortos hiperrealistas en los que el cineasta retrata los efectos inmediatos de la heroína. Después rueda You Killed Me First, Woman at the Wheel, Thrust in Me, Submit to Me, Stray Dogs y así hasta cerca de una decena de películas, todas durante el año 1985. A finales de la década la fiebre productiva de Kern sufre una severa recaída; con las venas hinchadas de jaco, vagabundea por las calles de Frisco. Retorna, como un fantasma, a comienzos de los noventa: graba video-clips para músicos como Sonic Youth o Marilyn Manson y vuelve a rodar películas que nada han perdido de la crudeza y mala baba de antaño, pero ahora se dedica fundamentalmente a la imagen fija.




Selección de películas

You Killed Me First (1985). Uno de los primeros cortos de Kern. Drama familiar salido de madre protagonizado por una arrebatadora Lung Leg y por el artista plástico David Wojnarowicz. La versión que hay disponible en Youtube presenta una merma importante: está amputada; faltan alrededor de seis minutos de metraje.

Thrust in Me (1985). Realizada al alimón con Nick Zedd, que se desdobla en los protagonistas femenino y masculino de la película, es una de las cuatro historias que conforman ese fresco sobre el scum neoyorquino que es Manhattan Love Suicides. La música de la banda sonora es de The Dream Syndicate. No diré mucho, para no revelar sorpresas antes de tiempo; tan sólo una advertencia: absténgase creyentes en el Crucificado y no aficionad@s al sexo oral.

Stray Dogs (1985). Como la anterior, fue incluida en Manhattan Love Suicides. David Wojnarowicz y Will Rice, el que fuera Pope de la escena artística del Lower East Side, frente a frente en una pequeña comedia sobre la relación del fan y el objeto de su veneración.

My Nightmare (1993). Última película de Richard Kern, al menos por lo que sé. Sobre la esencia masturbatoria de las prácticas artísticas; valga con esto.









1. You Killed Me First




2. Thrust In Me








3. Stray Dogs





4. My Nightmare



Manifiesto del Cine de la Transgresión – Nick Zedd (1984)

Nosotros, que hemos violado las leyes, mandatos y deberes de la vanguardia -i. e. aburrir, sedar y ofuscar mediante un proceso parasitario dictado por la conveniencia práctica- nos declaramos culpables de los cargos. Renunciamos abiertamente a y rechazamos el arraigado esnobismo académico que erige monumentos a esa pereza conocida como estructuralismo y se dedica a expulsar a aquellos cineastas que poseen la capacidad de ver a través de su mascarada.

Rechazamos asimilar su fácil enfoque sobre la creatividad cinemática; un enfoque que arruinó el underground de los sesenta cuando el azote de la Escuela de Cine se hizo con el control. Al legitimizar cualquier estúpida manifestación de cine blandengue llevada a cabo por una generación de estudiantes engañados, los lúgubres media de los centros artísticos y los críticos cinematográficos han ignorado completamente los estimulantes logros de los que se encuentran en nuestras filas: underground invisibles como Zedd, Kern, Turner, Klemann, DeLanda, Eros y Mare, y DirectArt Ltd., una nueva generación de cineastas que se atreven a desgarrar los rígidos corsés de la teoría cinematográfica en un ataque directo contra cualquier sistema de valores conocido por el hombre.

Proponemos que todas las escuelas de cine salten por los aires y que no vuelva a hacerse ninguna película aburrida. Afirmamos que el sentido del humor es un elemento esencial descartado por académicos seniles y, aun más, que un film que no impacte no merece ser visto. Todos los valores deben ser cuestionados. Nada es sagrado. Todo debe ponerse en cuestión y ser reconsiderado para liberar nuestras mentes de la fe en la tradición. El desarrollo intelectual exige tomar riesgos y que se produzcan cambios en los ámbitos político, sexual y estético, no importa quien pueda desaprobarlos. Nos proponemos ir más allá de todos los límites prescritos o establecidos por el gusto, la moralidad o cualquier otro sistema tradicional de valores que constriña la mente de los hombres. Nosotros pasamos por encima de las fronteras de los milímetros, las pantallas y los proyectores para alcanzar un estado de cine expandido.

Violamos el mandamiento y la ley que dice que debemos aburrir mortalmente a la audiencia en rituales de circunlocución y proponemos romper todos los tabúes de nuestra época pecando cuanto nos sea posible. Habrá sangre, vergüenza, dolor y éxtasis, en una forma en la que nadie se ha imaginado aún. Nadie saldrá ileso. Puesto que no hay vida después de la muerte, el único infierno es el infierno del rezo, de obedecer las leyes y de rebajarse ante las figuras de autoridad; y el único cielo es el cielo del pecado, de ser rebelde, divertirse, follar, aprender cosas nuevas y romper tantas reglas como puedas. Este acto de coraje se conoce como transgresión. Proponemos la transformación mediante la transgresión: convertirnos, transfigurarnos y transmutarnos en un plano más elevado de existencia para alcanzar la libertad en un mundo lleno de esclavos inconscientes.

Nick Zedd (Foto: Echo Dannon)


Cinema of Transgression Manifesto by Nick Zedd
We who have violated the laws, commands and duties of the avant-garde; i.e. to bore, tranquilize and obfuscate through a fluke process dictated by practical convenience stand guilty as charged. We openly renounce and reject the entrenched academic snobbery which erected a monument to laziness known as structuralism and proceeded to lock out those filmmakers who possesed the vision to see through this charade.
We refuse to take their easy approach to cinematic creativity; an approach which ruined the underground of the sixties when the scourge of the film school took over. Legitimising every mindless manifestation of sloppy movie making undertaken by a generation of misled film students, the dreary media arts centres and geriatic cinema critics have totally ignored the exhilarating accomplishments of those in our rank - such underground invisibles as Zedd, Kern, Turner, Klemann, DeLanda, Eros and Mare, and DirectArt Ltd, a new generation of filmmakers daring to rip out of the stifling straight jackets of film theory in a direct attack on every value system known to man.
We propose that all film schools be blown up and all boring films never be made again. We propose that a sense of humour is an essential element discarded by the doddering academics and further, that any film which doesn’t shock isn’t worth looking at. All values must be challenged. Nothing is sacred. Everything must be questioned and reassessed in order to free our minds from the faith of tradition.Intellectual growth demands that risks be taken and changes occur in political, sexual and aesthetic alignments no matter who disapproves. We propose to go beyond all limits set or prescribed by taste, morality or any other traditional value system shackling the minds of men. We pass beyond and go over boundaries of millimeters, screens and projectors to a state of expanded cinema.
We violate the command and law that we bore audiences to death in rituals of circumlocution and propose to break all the taboos of our age by sinning as much as possible. There will be blood, shame, pain and ecstasy, the likes of which no one has yet imagined. None shall emerge unscathed. Since there is no afterlife, the only hell is the hell of praying, obeying laws, and debasing yourself before authority figures, the only heaven is the heaven of sin, being rebellious, having fun, fucking, learning new things and breaking as many rules as you can. This act of courage is known as transgression. We propose transformation through transgression - to convert, transfigure and transmute into a higher plane of existence in order to approach freedom in a world full of unknowing slaves.

MÁS SOBRE EL CINE DE LA TRANSGRESIÓN EN LA RED:

- CINEMA OF TRANSGRESSION EN UBUWEB.

- NICK ZEDD.

- BLOG DE NICK ZEDD.

- RICHARD KERN.

*ANTES EN LA PEQUEÑA FILMOTECA PORTÁTIL.

1 comentario:

Thomas Moronic dijo...

Excellent! Richard Kern and Nick Zedd are both fantastic. TM x